Desde 1936 que el apellido Nöllmann circula en Argentina asociado al mercado eléctrico. En la actualidad, los herederos continúan al frente de la empresa en la que prácticamente se criaron, aportando sus ideas y animándose a proyectos de crecimiento.
Las salas eléctricas integradas, por decir un ejemplo, son una muestra del espíritu de la marca, porque surgieron durante la pandemia de 2020, en medio de una tormenta de ideas acerca a qué productos nuevos podían dedicar sus máquinas.
Con un equipo de ingeniería capaz de atender soluciones específicas y una fábrica que se dedica a todos los procesos (desde la limpieza, corte y plegado de chapas, hasta el armado de todo el interior) Nöllmann pisa fuerte en el mercado de tableros eléctricos. No es extraño entrar en su planta y ver cómo un puente grúa se mueve de acá para allá según las necesidades de fabricación de un shelter para entornos petroleros.

Son exactamente la misma experiencia y el mismo conocimiento, no solo técnicos o académicos, sino también de la industria local, los que permiten ofrecer equipamiento a medida. Es así que el departamento de ingeniería, aquel que luego le da a la planta las instrucciones de fabricación, está totalmente capacitado (y ávido) para recibir proyectos especiales, aquellos que requieran modificar alguna característica de los equipos estándar.
¿Alguien en la sala necesita un tablero eléctrico diseñado especialmente para un proyecto específico? Para esa persona, la propuesta es la siguiente: asesoramiento personalizado, diseño del tablero y fabricación.
Además, incluye soporte técnico especializado y entrega en tiempo y forma con garantía. Resta mencionar solamente que se cumplen con las normas y certificaciones correspondientes, y que la calidad de los productos utilizados es uno de las claves de su buen rendimiento posterior.